Los pagos, en su mayoría, se gestionan a través de un proceso en el cual, desde que el remitente lo inicia hasta que lo recibe el destinatario, participan varios actores. Todos son parte del mismo sistema: bancos centrales, bancos, procesadores de tarjetas, AISP (Account Information Service Provider) y empresas de clearing.
Cada pago, independientemente del medio a través del cual sea hecho, necesita pasar por el esquema de pago nacional, y los proveedores o actores que prestan algún servicio en este proceso, deben estar conectado de alguna manera al mismo. Por el momento, esa conexión está reservada para los bancos.
Ahora bien, estos tienen un desfasaje muy grande en la transformación del sistema que procesa los pagos, y esto se traduce en un atraso para todos los actores que participan en el proceso y que dependen de ellos para completar un pago, principalmente los usuarios finales o clientes del sistema bancario.
Con el crecimiento de internet y las operaciones online se ha puesto en evidencia la necesidad de una inmediatez en el envío y recepción de dinero, y hoy esto es posible gracias a la tecnología aplicada a la transferencia de datos: una autopista de pagos en tiempo real. Idealmente, estas, brindan acceso 24x7x365, lo que significa que siempre están en línea para procesar transferencias, esto incluye fines de semana y feriados. Además, necesariamente deben poder soportar gran cantidad de procesamiento de consultas simultáneamente.
En los Estados Unidos, el ejemplo más destacado de una red de pagos en tiempo real es la de The Clearing House. FedNow, la red de la Reserva Federal, está proyectada para lanzarse en 2023.
Si bien los RTP (Real Time Payment) pueden considerarse una forma de pago más rápido que la tradicional, no todos los pagos rapidos (Fast Payment) se realizan en tiempo real; son similares, pero existen algunas diferencias clave: las soluciones de pagos rápidos registran y liquidan las transacciones en menor tiempo que el habitual, pero no de manera inmediata. Otras soluciones de pago, como Mastercard Send y Visa Direct, envian mensajes de transacciones en segundos o minutos. Sin embargo, debido a que no liquidan las transacciones rápidamente, los pagos automáticos se consideran pagos más rápidos, pero no en tiempo real.
A medida que los comerciantes, las empresas y los bancos reconozcan el valor de los RTP, la adopción seguirá aumentando y los casos de uso seguirán surgiendo. Empresas de todo tipo reconocen el valor de los mismos. La segunda perspectiva anual de pagos en tiempo real de Citi Bank encontró que alrededor del 90% de los líderes empresariales están interesados en los mismos.
Una encuesta de 2018 de Global Payments Insight de Ovum y ACI Worldwide encontró que el 80% de los comerciantes, bancos minoristas y organizaciones de facturación se favorecieron con los pagos en tiempo real y la banca abierta; el 92% de los comerciantes y el 82% de las organizaciones de facturación con ingresos de al menos $5 mil millones esperan ver mejoras en el servicio al cliente como resultado de la adopción de este sistema. El 84% de los comerciantes regionales, los bancos minoristas y las organizaciones de facturación anticipan lo mismo.
En otras palabras, las organizaciones de diferentes tipos y tamaños ven los pagos en tiempo real de manera positiva y están ansiosos por adoptarlos.
Los pagos en tiempo real aumentaron durante COVID-19
No podemos hablar de pagos sin hablar de COVID-19. Ninguna parte del mundo quedó al margen de la pandemia y los pagos en tiempo real fueron una necesidad absoluta afrontar la emergencia que generó el cierre de fronteras y distanciamiento social obligatorio.
Los resultados del séptimo informe anual de tendencias globales de RTP de FIS, encontraron que la adopción de esta forma de pagos se aceleró durante la pandemia, en referencia a entidades bancarias tradicionales, pero no lo suficiente adecuado para la nueva realidad post-pandemia.
Hay una serie de desarrollos en la hoja de ruta hacia la modernización de los pagos en tiempo real que las organizaciones deben tener en cuenta cuando se trata de implementar diferentes casos de uso en los rieles existentes (y futuros). La continua demanda por parte de las empresas y usuarios del sistema de pagos y la evolución en los pagos en tiempo real ya no es un ítem en la lista de deseos en el área de desarrollos sino una prioridad que los bancos deben atender.
Columna por Laura Iglesias
